Una manifestación de hijos de put...digooo demócratas de toda la vida
"La política no es cosa de agitación, sino de ideas. No es cosa de pancartas, sino de proyectos".
"La oposición no se hace, ni mucho menos la alternativa, agarrándose a la primera pancarta que pasa por la calle"
"Se ha intentado sobrepasar al Gobierno no por las urnas sino por la presión de la calle".
José María Aznar, año 2003
Agradezco a Alex su aportación con estas maravillosas declaraciones de tan alto ( si, va con sorna) político.
Estoy ahora mismo acordándome de dos genios españoles como fueron Goya y Larra. Genios dispares, de disciplinas dispares (uno, como sabréis, pintor , y el otro, por si no lo supiérais, escritor , sobre todo de artículos, y político con mala suerte), a los cuales una cosa les terminó uniendo trágicamente: el asco por este país. Por la cerrazón mental. Por esa españa oscura, idiota, violenta, temerosa del cambio , del diálogo, que apuesta por batirse en duelo a hostia limpia antes que sentarse a hablar y pensar en el bien común, sacrificando por ambas partes.
No es que, por supuesto, quiera compararme con ninguno. No sé ni hacer la "o" con un canuto (de dibujar), y aunque hago intentos de artículo, no pretendo, como creo que hace el 90 % de los articulistas de este país , ponerme a la altura de Larra. Es únicamente que un día como hoy, con esta pataleta facha que han dado en llamar manifestación (de idiotez, supongo), comparto plenamente ese sentimiento de asco, de haber perdido completamente la fe en la capacidad de evolucionar de este país. Habrá quien diga que la manifestación popular (nunca mejor dicho) de hoy es, precisamente, una muestra de que la democracia funciona, que todo el mundo tiene derecho a lanzarse a la calle y no estar de acuerdo con el gobierno. Yo lo único que pienso que demuestra es que los que provocaron la guerra del 36 están ahí. Muerto el perro, la rabia sigue ahí. Cuarenta años dan para mucho.
Goya pensó que los franceses, después de la sangrienta ocupación, podrían enseñarnos algo sobre los derechos de los ciudadanos y las nuevas libertades. En lugar de eso, los españoles quisimos en el trono a Fernando VII, uno de los monarcas más inútiles y autoritarios de la historia. La gente dice que se volvió hosco y desagradable por su sordera, que le hizo paranoico. Yo creo que simplemente estaba de mala hostia con la panda de subnormales que habitaban , de forma mayoritaria, en su país.
A Larra le tocó vivir en una época de golpes de estado. ÉL mismo quiso medrar en política y no pudo debido a un golpe de estado que le quitó su puesto cuando apenas lo había rozado. Larra se pegó un tiro delante de un espejo, meses después de haber escrito uno de los artículos más geniales sobre nuestro país, que casi 200 años después sigue teniendo la misma fuerza: el día de los difuntos de 1836.
http://www.rinconcastellano.com/biblio/sigloxix/larra_ddifuntos36.html
Ya sabéis. Aquí yace media españa: murió de la otra media. Lo malo es que la otra media tiende a ser la misma. Siempre.
1 comentario
Anónimo -